La gastronomía griega es una de las más populares y reconocidas del mundo, gracias a sus sabores únicos, aromas deliciosos y sus ingredientes frescos y de primera calidad. Entre los ingredientes más utilizados en la cocina griega, los frutos secos ocupan un lugar muy destacado.
Los frutos secos más utilizados en la cocina griega son las nueces, almendras, avellanas, pistachos y semillas de sésamo, por nombrar algunos. Cada ingrediente añade un sabor y textura únicos a los platos, y se utilizan tanto en platos salados como en postres.
Los frutos secos son ricos en nutrientes esenciales, como proteínas, vitaminas y minerales, y son una gran fuente de energía. Además, se ha demostrado que los frutos secos son beneficiosos para la salud del corazón, ya que pueden reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
En la cocina griega, los frutos secos se utilizan en platos como dolmades, que son hojas de parra rellenas de arroz y nueces, y el plato tradicional baklava, que consiste en capas de masa filo rellenas de nueces, almendras y miel. Otro plato popular es el dakos, una ensalada de pan duro, tomate y queso feta con semillas de sésamo espolvoreadas por encima.
En definitiva, los frutos secos son un ingrediente clave en la cocina griega, añadiendo sabor, textura y nutrientes esenciales a los platos. Además, su delicioso sabor y sus beneficios para la salud los hacen ideales tanto para platos salados como para postres.