La cocina mexicana es una de las más ricas y variadas del mundo, con una gran cantidad de ingredientes y sabores únicos. Dos de esos ingredientes son los cacahuetes y las enchiladas, los cuales son muy populares en la gastronomía mexicana.
Los cacahuetes son un ingrediente muy versátil en la cocina mexicana. Aparecen en una gran variedad de platillos, desde salsas y moles hasta dulces y postres. Una de las formas más comunes de utilizar los cacahuetes es en las salsas y adobos, por ejemplo, en el famoso mole poblano o en el adobo de los chiles en nogada.
En una sartén, tuesta los cacahuetes a fuego medio-bajo hasta que estén dorados. Agrega el ajo y los chiles de árbol, y tuesta por un minuto más. Transfiere la mezcla a una licuadora y agrega el aceite de oliva y el caldo de pollo. Mezcla hasta que tenga una consistencia uniforme. Agrega la sal y pimienta al gusto.
Las enchiladas son otro platillo típico de la cocina mexicana, se trata de tortillas de maíz que se calientan en una salsa de chile y se rellenan con pollo, queso o carne. Uno de los elementos clave en las enchiladas es la salsa, que puede variar en sabor y picor.
Calienta las tortillas en la salsa de chile, hasta que se suavicen. Rellena cada tortilla con el pollo desmenuzado, los cacahuetes y el cilantro. Enrolla la tortilla y colócala en un refractario. Cubre las enchiladas con la salsa restante y el queso fresco. Hornea a 180°C hasta que el queso se derrita.
Los cacahuetes y las enchiladas son dos ingredientes esenciales en la cocina mexicana. Tanto los cacahuetes como las enchiladas pueden ser utilizados en una gran variedad de platillos, y son una muestra más de la riqueza y variedad de la gastronomía mexicana.